Música para cóctel en Zarzavilla, Frómista

Después de la ceremonia religiosa y antes del banquete de boda en Zarzavilla los músicos de Ad Libitum deleitaron a los asistentes con su amplio repertorio.

La dedicación vitícola en Frómista tiene una tradición que se encuentra ya documentada en el siglo XIV, y que se relaciona fundamentalmente con la producción del monasterio San Martín de Frómista y los vasallos de San Martín. Como vestigio de esa dedicación preferente hoy día existe, en una de las tres áreas periféricas donde se han agrupado las bodegas, en la zona del Castillo, perfectamente conservada desde el siglo XV una de las bodegas más antiguas de la comarca, la bodega Zarzavilla, heredera de la producción iniciada con los monjes benedictinos de San Martín y continuada después de la desamortización de Mendizábal por varias familias de las que toma el testigo Alejo Serrano Peña abuelo del actual propietario.

Cóctel en Zarzavilla

Actualmente la Bodega Zarzavilla, en Frómista (Palencia), es una finca que data del siglo XIV. Su interior, cargado de historia y de carácter castellano, convive con el verde intenso de sus espectaculares jardines.

Las modernas y amplias instalaciones, permiten celebrar eventos exclusivos con alto número de invitados desde su llegada con el coctel, al banquete y la fiesta posterior.

Los novios decidieron que querían contar con música en directo para el cóctel y sin dudarlo eligieron a los músicos de Ad Libitum para que amenizaran este momento. Los invitados disfrutaron escucharon las versiones que hicieron de grandes éxitos del pop y del rock  como por ejemplo Highway to hell de AC/DC o One de U2.

Sin lugar a dudas, este cuarteto es la mejor opción si deseas acompañar con música en directo un evento. Si lo estás pensando no dudes en contactar mediante el formulario de nuestra página web.

 

 

Boda en la Iglesia de San Martín, Frómista

Los músicos de Ad Libitum participaron en una boda en uno de los templos románicos más importantes de la provincia de Palencia.

 

La Iglesia de San Martín de Tours es uno de los referente obligados en el románico palentino y español. Esta famosísima construcción es de los pocos edificios del románico pleno o dinástico en España y muestra evidentes relaciones con otros edificios señeros del Camino de Santiago como la Catedral de Jaca, San Isidoro de León y la Catedral de Santiago de Compostela.

Un templo en el que la música de Ad Libitum acompañó una bonita ceremonia de boda.

Boda en Frómista

Fotografía: Victor Rivera

Fue declarada Monumento Nacional en 1894 y a raíz de ello, en los últimos años del siglo XIX y primeros del XX, fue restaurada por el arquitecto Aníbal Álvarez, siguiendo los criterios de la época, puestos de moda por Viollet-le-Duc, que consistía en devolver al estado original los edificios, aunque para ello hubiera que reconstruir partes completas. Otro de los excesos que se cometieron fue la sustitución de algunos capiteles por copias (uno de ellos llegó a ser mutilado por «impúdico»). Las piezas originales se encuentran en algunos museos.

Para ser más explícitos, en estas obras se elimino una torre campanario que se erigió sobre el cimborrio, así como la pintoresca escalera y galería volada que servían de acceso a la misma. Se acondicionaron especialmente los flancos meridional y occidental, que eran los más afectados por las adiciones y ruinas posteriores a la edificación románica.

Los novios con buen criterio eligieron para la boda en esta Iglesia de San Martin de Frómista sobre todo música clásica, muy acorde al templo en el que se estaba realizando la ceremonia. Los músicos de Ad Libitum interpretaron en la boda religiosa piezas como La llegada de la reina de Saba de G.F. Haendel o el Air de la Suite nº3 de J.S. Bach.

El Cuarteto después de su intervención con su música en la ceremonia religiosa continuó acompañando a novios e invitados en el cóctel anterior al banquete en la Bodega Zarzavilla.